Antes que nada, me veo en la obligación de aclarar que nunca he considerado a Brian de Palma un virtuoso de esto del séptimo arte, cosa ésta que me ha dado no pocos quebrantos con amigos y demás especies. Será por un íntimo prejuicio que viene dado por su fijación casi adoraticia por clásicos consagrados; no sé, pero como diría uno: no me mola su gramola...
... Y sin embargo, he percibido en sus últimos trabajos una saludable voluntad por forjar una especie de "discurso de Palma", o lo que sea. Ya sea en la incómoda REDACTED, de largo su mejor film, o en la que hoy nos ocupa.
Como decía antes, no esperaba gran cosa de THE BLACK DAHLIA, pero el relato de James Ellroy, basado en un truculento y oscurísimo suceso en las alcantarillas de Hollywood, poseía la suficiente fuerza como para merecer un visionado. A grandes rasgos, THE BLACK DAHLIA es una película extraña, irregular, casi expresionista, con un marcado gusto por lo macabro y con tantos aciertos como errores por metro cuadrado, lo que acaba por desorientar al espectador, que se ve transportado de un viscoso terror psicológico a una trama "negra" clásica, pasando por una voluntariosa presentación de personajes simplemente abrumadora. THE BLACK DAHLIA es una historia dentro de otra historia...; empezamos con una cirriante escena de lucha callejera entre maleantes y agentes de policía, continuamos con tórridos juegos de seducción a cargo de Scarlett Johansson y a los que no puede resistirse Josh Hartnett, un actor que nunca llegará a nada si no cambia de peinado. Entre tanto hay una especie de investigación velada sobre un tremebundo asesinato en el que se intenta esclarecer la identidad de la víctima y atrapar al asesino. El caso de "la dalia negra" tuvo su repercusión por lo terrible detalles: la víctima, una ínfima y anónima aspirante a actriz (aquí la bellísima Mia Kirshner) fue encontrada literalmente cortada en dos y con una horrible sonrisa provocada por sendos cortes en las mejillas. Creo que de Palma, dejando a un lado sus habituales excesos y licencias, hace un buen trabajo de recreación, especialmente en la parte final, donde el espectador tiene la sensación de estar ante un profundo secreto y finalmente se impone la turbiedad de la trama.
Francamente, me parece un producto con la suficiente dignidad y entidad como para no temer ni a la siempre difícil adaptación de Ellroy ni al conservadurismo del espectador habitual, que requiere siempre un aviso en toda regla de a qué se va a enfrentar.
Saludos en negritud.
2 comentarios:
Pues en esta ocasión no estoy del todo de acuerdo contigo. La película me pareció floja, mucho, de las más flojas del siempre interesante y reivindicable DePalma, pero no me creí en ningún momento a ninguno de los actores y actrices.
Esperaba mucho más de lo que se me enseñó.
Saludos
A mí me decepcionó profundamente, no está a la altura del género. De este mismo director prefiero "Carlito's Way" o la efectista "Scarface", entre otras. De Palma es otro de los que parecen haberlo dado todo hace tiempo...
Publicar un comentario