jueves, 12 de junio de 2008

Bomba de vacío

Al fin puedo decirlo: tengo un grave problema: soy incapaz de ver lo que todo el mundo ve, y no me refiero a Gran Hermano.
Hasta hace bien poco pensaba que mi rechazo hacia ese "nuevo cine oriental", que desde principios de los noventa insiste en querer subvertir los términos y condiciones que componen el cine, era una nadería, las pensaba malas (extrañas a lo sumo) e incapaces de transmitir emociones, un artefacto exótico y resbaladizo más pendiente de interiorizar que de mostrar.
Eso era antes. Ahora me doy cuenta de que o bien me he quedado obsoleto en esto de las películas o la cosa ha corrido que se las pela y yo no me he enterado.
La verdad es que todo esto sería bastante más fácil si el dichoso cine oriental (qué poco me gusta esto de las etiquetas) no hubiese irrumpido en nuestras plácidas vidas como elefante en cacharrería.
Lo siento, quien me conoce sabe que no soy nada reaccionario, pero quedéme frustradísimo tras ver 2046, el enésimo truco visual de Wong Kar Wai, cuyas películas todos alaban pero nadie es capaz de explicarte. Perdónenme, pero necesito en primer lugar que me cuenten una historia, luego que me la crea, y en ultimísimo lugar, si no hay nada que contar, que al menos me entretengan con oficio y buen hacer. Esta película no tiene ni lo primero, ni lo segundo, ni lo tercero, sino que va por libre e intenta convencernos por huevos de que asistimos a algo por primera vez, cuando está claro (sobre todo después del la última ridiculez del senil James Cameron [y si no, indaguen]) que todo está ya hecho en el séptimo arte y, si acaso, podemos contar con autores que explotan su personal visión de mundo.
IN THE MOOD FOR LOVE tenía su gracia, una forma de hacer cine con soltura y desparpajo, recordando, sobre todo, a Bresson y al primer Godard, lo cual no es moco de pavo. Pero claro, estirar el chiste es algo que nadie en esto del cine (y bien que lo advertía Orson Welles en F FOR FAKE) ha podido permitirse sin caer (como efectivamente ha sido) en una explosión colorista y vacía de contenido. Es decir: un videoclip de lujo.
Sé que me van a acribillar por esto, pero a día de hoy mi pobre intelecto sólo da para entender a John Ford y cuatro más
"Visionarios" saludos.

2 comentarios:

wedge dijo...

Bueno,bueno siempre nos quedara el bueno de takeshi y su violencia desmedida.

dvd dijo...

Atento por lo tanto a próximas reseñas. Prometo no defraudar.

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!