Al fin he podido ver STILL WALKING (ARUITEMO, ARUITEMO), de Hirokazu Kore-eda... Y lo siento, pero no voy a poder ser objetivo. Me da igual si se parece a CUENTOS DE TOKIO o si su director es incapaz de salirse de los parámetros más "clásicos" (si algo así existe) de la nouvelle vague; mayormente porque esta es una película impresionante; impresionantemente dirigida e impresionantemente interpretada. Una película que no habla de nada pero con la que quedas identificado desde el primer fotograma... ¿he dicho que no habla de nada?... Perdón, ¡parece que no habla de nada! STILL WALKING es un día en la vida de una serie de personas, una reunión donde el espectador es el invitado invisible. Los personajes hablan, cocinan, beben, comen, interrumpen, son soeces, corteses, callados, parlanchines... Sí, igual que en la vida real... ¿Que lo del hermano muerto es una excusa argumental mil veces empleada? Vale, ¿y qué? Aquí no hay ni rastro de sentimentalismo, el hermano vivo es vapuleado constantemente por el padre y especialmente por la madre, el personaje más contundente del film. Son personas que han sufrido un duro golpe y no creen merecerlo, así que lo justifican a base de frases y actos mordaces; y, sin embargo, hay una especie de lánguida aceptación de estos actos cuasiseniles, ya ni por la edad, sino por el conocimiento del dolor. "No hay nada tan doloroso como sentarse ante la tumba de un hijo", dice la madre mientras echa calmadamente cazos de agua sobre la ardiente lápida.
Una gran película, en la que el espectador tiene la agradable sensación de haber aprovechado plenamente dos horas de su vida y que, si su limitada difusión lo permite, va camino de convertirse en uno de los mejores títulos de la pasada década.
Aún les mando saludos.
5 comentarios:
¿Qué me dices del personaje de la matriarca? A mí me parece uno de los personajes más pavorosamente egoistas de la historia del cine. Jesús, si es que parece que con cada sonrisa te clava 10 puñales, la cabrona de ella.
Totalmente de acuerdo con tu texto. Dejemos de ver la películas comparandolas con tal o cual otra.
Still Walking es una enorme película que fluye con pasmosa naturalidad. Una joya.
Saludos.
La madre/abuela está perfectamente interpretada y no tiene nada de la habitual frialdad japonesa; esa señora se moja y de qué manera...
Bueno, que conste que sigo prefiriendo a Ozu ¿eh?...
Tomo buena nota de la recomendacion, tengo que ver esta peli.
Un saludo!
Una película maravillosa. La comenté (con poco éxito) cuando la proyectaron en las salas, hace meses. A mí me impactó y me alegro que compartas ese gusto en el que me he sentido un poco solitario. De acuerdo con lo que dice AVE de la matriarca: cruel, despiadada, única.
Saludos.
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