domingo, 5 de enero de 2020

Rincón del freak #387: Nación majara



Espero poder rematar hoy ya con lo de los motivos navideños y quitarme esta losa de encima. Y como es el día de los Reyes Magos y todo eso, y ya creo que los he agotado, me acordé súbitamente de otro rey, que a mí me toca particularmente. KING DAVID fue una película sumamente extraña en su día, ya que iba para gran superproducción histórico-bíblica (no confundir), pero se quedó en una sincopada aproximación del pastor que fue elegido como rey de los hebreos, con el despótico Saúl aún en el poder, lo que desató una serie de enfrentamientos cercanos a lo que hoy conoceríamos como una guerra civil. Confieso que todo lo que huela a mito bíblico y tal me conmueve poco, aunque hay que reconocerle al guion de Andrew Birkin y James Costigan el esfuerzo por desmitificar y dotar de un carácter más terrenal lo que está normalmente visto con el halo de la leyenda. Sin embargo, la torpe dirección de Bruce Beresford y las más que discutibles actuaciones (¿Richard Gere? ¿en serio?) lastran el conjunto y lo dejan en lo que es, un subproducto totalmente prescindible.
Y ahora, un breve repaso sobre la nación hebrea desde su fundación para entender por qué se comportan así aún actualmente: Llevamos cinco minutos de película, el profeta Samuel va a toda hostia a encontrarse con un taciturno Saúl. Le chilla y le increpa, y le dice que su dios está hasta los cojones de él, que cómo no ha aniquilado a sus enemigos y hecho de Israel un estado más grande. Súbitamente, coge una espada y le corta la cabeza a un señor que había venido a dialogar. No vales, Saúl, así que me voy a un pastor canijo y lo designo como próximo rey com dos piedras de colorines. Luego lo pongo delante de un gigantón armado de una honda... y voilá, Israel, como Teruel, ya existe...
Saludos.

No hay comentarios:

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!