viernes, 9 de enero de 2009

Mil años por delante

Cuando la gente simpática se dejaba el pelo largo y tomaba LSD para hablar de amor y paz, el Sr. Reed y unos cuantos bastardos más dejaban caer perlas como "besa mis resplandecientes botas de cuero", y esas cosas... Unos visionarios...


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gusta mucho la Velvet, me gusta mucho la LSD. Un abrazo.

dvd dijo...

Cuidado con las adicciones... sobre todo si no pueden ser colmadas...

Anónimo dijo...

En esta vida, en este mundo, nada puede ser colmado. Palabra de Dios, te alabamos Señor.

dvd dijo...

Se pueden (y hasta deben) colmar las "aspiraciones" del cocainómano... amén...

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!