viernes, 16 de enero de 2009

This is England?

No, hombre, cuidado con lo que decimos; he sufrido la experiencia de compartir barra con un escocés (no embotellado) y cometer el fatal error de llamarle inglés... y salvé el cuello porque, al fin y al cabo, le caía simpático.
Y eso que TRAINSPOTTING es una producción británica; y eso que Danny "inconstante" Boyle es hijo de católicos irlandeses. Pero Irvine Welsh no; él sí nació en Edimburgo y fue el verdadero artífice de esta pequeña joya que con el tiempo ha ido creciendo hasta convertirse en todo un mito. Un mito atípico, podríamos decir, pues no se trata de un relato complaciente acerca del enésimo relevo generacional, sino de un exhaustivo compendio de las miserias a las que se enfrentan un grupo de estrafalarios jóvenes inmersos en la heroína, el paro, las borracheras, el fracaso... todo a la vez, con un ritmo, más que ágil, infernal; con la voz en off de su protagonista como hilo conductor; con una banda sonora deudora del mejor Tarantino; con una imaginación visual sin límites aparentes.
TRAINSPOTTING supuso el espaldarazo mundial de Danny Boyle, que luego ha ido dando tumbos a duras penas, con gotas de su gran talento y de Ewan McGregor, catapultado al olimpo de los intérpretes standard de Hollywood, lo que se da en llamar estrella de cine. Pero el gran acierto de este film reside en la franqueza y cercanía con la que se enumeran a toda hostia las cosas que ocurren donde nadie quiere mirar; lo dije a propósito de ALL OR NOTHING, que vendría a ser la cara familiar del asunto, mientras que TRAINSPOTTING, de una forma mucho más cruel, pone el caramelo al alcance para acabar retirándolo en el último momento. Sólo hay que echar un vistazo a esa última y magistral escena en la que McGregor engaña a todos sus "compañeros" con el perfecto ensamblaje de la música de Underworld.
Doce años han pasado desde entonces, ni Boyle ni ningún otro han conseguido llegar de nuevo a estos límites, los que te permiten reírte un rato y, seguidamente, sentir arcadas del género humano. Imprescindible.
Saludos empapados...

1 comentario:

Groupiedej dijo...

De mis películas favoritas de los noventa, con mucho, sin embargo le hice una reseña bastante cortita, no recuerdo por qué. Yo me sigo quedando con el discurso inicial. Es lo más sincero sobre drogas que he escuchado nunca: http://pasionesyotrosdesmanes.blogspot.com/2008/04/trainspotting.html

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!