viernes, 22 de mayo de 2009

Vendo enanitos verdes

Algunas veces, la falta de presupuesto, unida a la falta de prejuicios logra momentos únicos, irrepetibles. Vi VAMPIROS EN LA HABANA prácticamente cuando se estrenó, en un pase por TVE (la de entonces, hará 22 o 23 años) y recuerdo quedarme patidifuso con aquella animación epiléptica, llena de imperfecciones, tan lejos del canon Disney, tan punk ¿por qué no? Y aquella historia absolutamente inverosímil que le daba la vuelta por completo al mito vampírico, con un dicharachero sentido del humor típicamente caribeño que se mezclaba sin pudor con tramas gangsteriles y todo un mosaico panfletista sobre los momentos previos al derrocamiento de Machado.
La trama es un delirio. Resulta que las organizaciones mafiosas, digo vampiras, de ambos lados del Atlántico se disputan el invento de un científico, vampiro asimismo, radicado nada menos que en La Habana. Dicho científico ha estado suministrándole Vampisol (así se llama el brebaje) a su sobrino Joseph Amadeus von Dracula, Pepito para los amigos; un trompetista juerguista, mujeriego y amigo de revolucionarios, todo por la causa. El film, aparte de su trillada trama, merece la pena sobre todo por sus sorprendentes detalles, que la llenan de frescura e imaginación. Es posible que haya envejecido regular, pero sigue siendo objeto de culto entre una inmensa minoría de frikis (nótese el detalle de la curiosa coincidencia entre el nombre del brebaje y una discográfica especializada en música subterránea).
Notable también la magnífica banda sonora a cargo del gran Arturo Sandoval.
Juan Padrón, artífice de esta curiosa película y animador de contrastada carrera, repitió hace cinco o seis años con MÁS VAMPIROS EN LA HABANA, con bastante menos fortuna que ésta, instalada definitivamente en el subconsciente guerrillero de toda una generación.
Una transfusión de saludos.

3 comentarios:

Dr. Quatermass dijo...

Buff, has despertado algo del fondo de mi cerebelo, nunca me hubiera venido a la mente pero me suena mucho haberla visto, tengo que buscarla.

Saludos!

dvd dijo...

Si la cosa es urgente, YouTube te la sirve en siete capítulos.

Eduardo dijo...

Punk, jjajajaaj. Desde luego no es un canon Disney. Te acuerdas de aquella tve que nos ponía aquellas pelis? Te acuerdas de Pilar Miró?

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!