lunes, 5 de noviembre de 2018

La creación descreída



Lo decimos muchas veces ¿Cómo puede acercarse el cine a la vida real? Yo creo que el realismo es una trampa, casi una falacia, y que no hay nada menos real que el realismo. Por otra parte, esos pequeños"retazos" (me acuerdo de Mekas, que buscaba la belleza a través de la realidad)pueden hallarse por sorpresa en los rincones más insospechados, como las flores que se han abierto paso entre un mar de cemento. RESTER VERTICAL confirma a Alain Guiraudie como un autor insobornable, también imperfecto, dispuesto a asumir la caída y reconocido sólo a medias e incluso incomprendido por sectores habitualmente de vanguardia. Quizá porque su cine no camina en dirección a "lo moderno", sino que parece perplejo ante su propia circunstancia de artefacto único y desamparado ¿Cómo, si no, abordar la historia de un supuesto cineasta que se queda a vivir inmediatamente con una pastora a la que acaba de conocer, para después quedar sunido en la indigencia y al cargo del hijo recién nacido de ambos? Creo que casi nadie ha comprendido esta película, o al menos no han podido ubicarla en su debido contexto, que no es otro que el de la alegoría congelada; un poco a lo que en su momento inició Gus van Sant con GERRY y ahora mismo supone el motor creativo de Jim Jarmusch. Guiraudie nos sume en un absurdo nunca exagerado, sino encogido de hombros, sin respuestas, nada cómico y sí exacerbadamente crítico. Porque esta historia habla, entre otras muchas cosas, de la imposibilidad de ser genuinamente bueno sin caer en la incomprensión de una sociedad acostumbrada a aceptar como natural la maldad; puede que un cierto rasgo de santidad, muy deshilachada, eso sí, pero que vacía la narración de contenido semántico para colocaenos frente a nuestros propios temores e iniquidades. Lo afirmo porque supuestos "críticos de la seriedad" sólo han visto coños filmados frontalmente... Así nos va...
Saludos.

No hay comentarios:

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!