sábado, 19 de junio de 2021

Películas para desengancharse #78


 

Quieres hacer una película, pero no tienes dinero. Pero tienes un millar de ideas bullendo en tu cabeza. Pero vives en un miserable agujero de New Jersey, y siempre ves a la misma gente que siempre tiene los mismos problemas, y que siempre se queja de los mismos problemas. Pero no puedes quitarte de la cabeza la idea, fija y poderosa, de hacer una película. La harás, como sea. Aunque tengas que pedir prestado, robar, prostituirte o mentirle a tu abuela moribunda, porque es lo único que quieres hacer, aunque te cueste la cordura, o aunque no te recuperes jamás. Muchos lo han intentado antes y han terminado mal ¿por qué ibas a ser tú diferente? ¿porque tú sí tienes talento? Déjame entonces decirte una cosa. Cuando Kevin Smith rodó CLERKS, tenía apenas 24 años; usó los 30000 dólares que tenía para comprar una cámara y película en blanco y negro. Tuvo que convencer a amigos, pedir prestado, poner anuncios y saltarse una sola norma: en el cine, puedes mentir a todos y sobre todo, pero no puedes mentirte a ti mismo. Smith sabía que estaba haciendo una mierda de película, pero era mierda fresca, honesta, que exprimía cada dolar invertido tan sólo para poner en imágenes un día cualquiera en la vida de un puñado de gente. Y puedes hacerte mil pajas mentales, porque críticos más inteligentes que tú han rastreado analogías que sobrepasan lo metafísico, y se han escrito tesis doctorales sobre el famoso diálogo de la estrella de la muerte, o sobre la irreverente escena "perdida" en el funeral. Da igual, ya sabes que se puede hacer, y que puedes hacerlo, o puedes quedarte en esa tienda de mierda en la que trabajas y vegetar, mientras echas la culpa al mundo de todas tus desgracias...
Saludos.

No hay comentarios:

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!