domingo, 26 de mayo de 2013

Rincón del freak #109: Un horror de cartón piedra



Un horror es, efectivamente, HITLER´S MADMAN, un estiradísimo panfleto antinazi para el que la Metro reclutó a un Douglas Sirk obediente y cumplidor, pero sin ninguno de los valores cinematográficos que hicieron de él uno de los mejores directores del periodo clásico de Hollywood. Es más, estoy seguro de que el nazismo, los nazis, lucían mucho más terroríficos en sus propios panfletos; y se me viene a la cabeza, cómo no, Leni Riefenstahl. Ya desde el truculento cartel promocional, en el que unas virginales muchachas aparecen esparcidas ante una gigantesca y anómala mano gigante coronada con un elocuente "Sensational!", la historia (historieta más bien) nos sitúa en un bucólico pueblo checo que parece sacado de las páginas de Shelley y en el que no nos hubiese extrañado ver ondear la capa verde del Dr. Doom... Allí llegan los nazis, que incordian un poco al párroco mientras va de procesión, hacen preguntas a lo Philip Marlowe (ya saben: miradas aviesas, cuellos estirados...) y sospechan que quizá exista una resistencia montañesa local cuya intención sea dar al traste con los planes de un Hitler al que, como no podía ser de otra manera, no veremos nunca. Por destacar algo, sólo podría destacar a John Carradine, que hace lo que puede para hacernos creíble a un oficial de las SS con acento de Poughkeepsie... En definitiva, HITLER'S MADMAN es uno de esos patéticos ejemplos de comedia involuntaria en los que una risa inesperada sustituye al verdadero efecto que se creía que tendría. Porque si alguno de ustedes se asusta viendo esto es que tiene serios problemas emocionales...
Saludos esvásticos.


... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!