domingo, 30 de octubre de 2011

Rincón del freak #43: Madresita María del Carmen de los espacios interestelares



¿Qué es lo más freak que se nos puede ocurrir? Da igual, cualquier cosa nos vale; lo único que tenemos que hacer es despojarlo de cualquier mitomanía imperante, la misma que hace que nos traguemos bodrios infumables sólo por venir de donde vienen, y trasplantarlo a nuestra propia idiosincrasia. Llámenlo folklore, pajas mentales o lo que quieran, pero una de las cosas más sanamente divertidas que he visto últimamente es el corto de apenas siete minutos PROTOPARTÍCULAS, escrito y dirigido por Chema García Ibarra, que hace bueno el tópico que dice que la imaginación es el mejor sustituto de la escasez de medios. Rabiosamente desprejuiciada y autoconsciente, el atrevimiento consiste en contarnos una delirante historia de ciencia ficción en la que un hombre revela los pormenores que le llevaron a ser víctima de un experimento secreto en el que su cuerpo quedó transformado en protomateria (sea lo que sea eso, claro), por lo que debe llevar un traje especial, si no se desvanecería en el espacio... Todo es contado en un off desganado, mientras vemos imágenes de este extraño tipo en las situaciones más comunes: comprando pan, regando las plantas, tirando la basura... Y uno no sabe si admirarse de los cojones de Gª Ibarra o directamente partirse de risa, porque ese improbable astronauta nos cuenta que hay un pero, y es que el traje tiene un rasguño y por tanto sus días están contados. Todo ello en una barriada como la suya y la mía y personajes tan entrañables como José Manuel, el único amigo de este desdichado personaje. Ya digo, contarlo no le hace justicia y además le quita el elemento sorpresa, pero si tienen la suerte de ver este marcianísimo cortometraje les garantizo que se van a quedar de piedra, no hay otra cosa igual al oeste del Guadiana...
Protosaludos.

No hay comentarios:

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!