miércoles, 2 de marzo de 2011

¿Notable alto?



No suelo poner nota a las películas, me parece reduccionista y molestamente autocomplaciente y poco exigente con uno mismo; dicho esto, TRUE GRIT (versión hermanos Coen) es a la autoría lo que un bloguero a una crítica cinematográfica. Esto es: depende de cómo dicho bloguero haga suyo lo que escribe, así, los Coen revisitan, remodelan y reinteriorizan tanto la novela de Charles Portis como el magnífico film de Henry Hathaway, pero no reinventan nada que no hayamos visto demasiadas veces como para que ya apenas nos sorprenda casi ninguna "nueva vuelta de tuerca". TRUE GRIT clama por viajar en el tiempo y enclavarse en otra época, otro Hollywood donde, irónicamente, creo que los Coen no encajarían demasiado bien; su cadencia, sus diálogos, su reposado sentido del humor, sus continuos golpes de emoción (con un final antológico y no apto para corazones sensibles), son reverberaciones de un cine clásico que siempre ha subyacido en las películas de estos inconformistas del sistema. La historia es de sobra conocida, así que me centraré en otros aspectos, como las interpretaciones; no es el mejor papel de Jeff Bridges, pero tampoco le hace falta, porque Bridges ya sólo hace de sí mismo y ha alcanzado tal grado de maestría que, al igual que aquel último John Wayne, que ganó su único oscar por su Rooster Cogburn, le basta con una mirada (esta vez ciclópea), un gesto o una sonrisa de través para llenar la pantalla. Matt Damon está correcto y la "media lengua" le viene fenomenal; y la niña pues hace de niña repelente pero determinada, aunque me gustaba más Kim Darby que tenía más gracia. Me da la impresión de que los Coen se dan cuenta demasiado tarde de que, transcurridas tres cuartas partes del film, aún le quedan demasiadas cosas por meter, así que el último tramo se precipita con personajes que aparecen y desaparecen, lo que le resta empaque a una narración que avanzaba lenta pero segura; y sólo a la mitad se permiten un par de licencias (que una peli de los Coen no lo sería si las mismas) en sendas escenas que rozan lo onírico, como es el descubrimiento de un ahorcado a una altura exagerada y la jocosa aparición de lo un curandero digamos "pintoresco" y que no desvelaré aquí.
TRUE GRIT es una magnífica película; al principio, cuando no sabía qué iba a encontrarme, me recordó agradablemente a MILLER'S CROSSING, su mejor film, pero luego los Coen aflojan un poco (aflojar, no flojear) y se abren a un género, el de aventuras, en este caso cruzado con un western, para regalarnos un par de horas de entretenimiento de calidad no tan inolvidables como podía parecer en un principio, aunque sí de una solidez que da cuenta de la maestría que sus autores han alcanzado a estas alturas. No le pongo nota, pero casi llega al notable alto de recomendación, así que véanla.
Saludos legales.

2 comentarios:

Kinezoe dijo...

Pues a mí me decepcionó un poco. Me esperaba que hicieran con el western algo parecido a lo que hicieron con el género gánster cuando estrenaron "Muerte entre las Flores", pero ni de lejos...

La niña me cansó y el villano me pareció flojísimo. Tan sólo la ambientación visual (la banda sonora tampoco aporta mucho) y el papel interpretado por Jeff Bridges, que últimamente está que se sale, le hacen conseguir algunos enteros. No más de un bien le pondría yo. De los Coen siempre se espera algo más.

Saludos.

David dijo...

A mi me pareció excelente.
Me gustó más que la versión de Hattaway.
La película me pasó en un suspiro, me hizo reir y emocionarme. Me deleite con la narración clásica, los paisajes, la ambientación y los intérpretes (Bridges enorme, la niña muy bien y Damon de lo mejor que se le recuerda) y luego están los toques Coen con sus personajes y situaciones frikosas, los estallidos de violencia y esos momentos onírico mágicos tan suyos (la cabalgada bajo las estrellas).

En fin que me ha gustado mucho, más que Origen, 127 horas o la red social que ya las vi y supongo que más que cisne negro, el discurso del rey y Winters bone que todavía no he visto...

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!