sábado, 2 de marzo de 2013

Vida prócer: El cine de Hong Sang-soo #7



En HAEBYONUI YEOIN (MUJER EN LA PLAYA), Hong Sang-soo sigue en su empeño de arrancarle pedazos íntegros a la realidad y ofrecérnoslos con un envoltorio aparentemente descuidado; aunque, observando atentamente, hay aquí una mayor elaboración del guion y menos fijación por unos personajes que, exceptuando al inefable director de cine, entran y salen de la trama central (si es que pudiésemos atribuir alguna) sin apenas dejar un rastro que no sea el de su propia levedad. Lo complicado aquí es constatar cómo el relato trífido va perdiendo consistencia hasta llegar a dicho personaje central, abandonarlo a su suerte, y, a partir de ahí, reconstruir todo el guion hasta un desenlace que, obviamente, apenas difiere del comienzo. Tenemos a tres personajes, uno es director de cine y necesita ir a la playa (las playas aquí son frías y desapacibles, no crean) para inspirarse en su próximo guion; sin embargo, pide a un amigo que le acompañe, y éste, a su vez, le advierte de que irá con la condición de que lleve a su novia. Una vez allí, el ingenio del director embelesará a la muchacha y el otro queda como una sombra agregada... ¿Problemas? No para Hong Sang-soo, desde luego. Aunque los tres se marchan otra vez a la ciudad, Kim, el director, vuelve, y pese a rogar a su nueva conquista que no le deje solo (por teléfono), las penas se le irán rápido al entablar amistad con dos amigas que "casualmente" se alojan en el mismo hotel que él. Lo que en otras manos sería una comedia de enredo, cuernos y malentendidos, el director coreano (el de verdad) lo encara con un sentido irónico que, aunque le cueste reírse de sus personajes, estos son tan deudores de su propio creador que uno, casi sin quererlo, piensa ineludiblemente en el relato autobiográfico. Y para los neófitos, puede que sea el mejor acercamiento a una obra que crece a medida que se le coge el tranquillo.
Saludos.




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... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!