domingo, 8 de abril de 2012

Rincón del freak #61: Autoconciencia sinóptica extralimitada invasoramente (o la falta de culpa)



Bruce Campbell es, todos ustedes lo saben, un actor discreto que ha alcanzado cotas inimaginables de lo que a veces es denominado "de culto", gracias, fundamentalmente, a que fue el protagonista de EVIL DEAD, sobre la que no pienso extenderme, que para eso tienen Internet... y a Jesús Palacios, qué coño... La cosa es que el amigo Bruce (en un alarde de habilidad, todo hay que decirlo) ha ido construyendo(se) un personaje paralelo, una especie de segundo "yo", que no sólo es que le sirva para rellenar argumentos vacíos, como es el caso, sino que en realidad la atracción es él mismo, una especie de transmutación de roles que yo no recuerdo si no exceptuando experimentos en primera persona, y no es el caso. De todas formas, enfrentarse a una cosa como MY NAME IS BRUCE (sí, es el nombre) podía haber dado sus frutos más o menos interesantes, pero el señor Campbell parece olvidarse por completo de una premisa básica para hacer funcionar una autoparodia, y es que, claro, hay que contar algo y no fiarlo todo a una sucesión de lugares comunes que hemos visto muchas veces, y que el propio Sam Raimi ha hecho con mucha más gracia. Es una mascarada sonrojante, puesto que la cutrez es impostada, de cartón piedra pero hasta viendo a la gente que lo transporta, y en lugar de mirar de frente a la cámara y explicar: "Éste soy yo. Bruce Campbell; y soy tan gilipollas como cualquiera de ustedes... ¿qué coño hacen viendo esta mierda? ¿acaso les he vuelto a engañar y no se han dado cuenta?". No voy a escribirle un guion al señor Campbell, claro, pero no hubiera estado de más un poco de sorna en algo tan previsible. Si no la ven no pasa nada, lo juro...
Saludos en mi nombre.

2 comentarios:

miquel zueras dijo...

Pues nada, igual me ahorro esta película. Para autoparodias creo que mejor la que hizo Van Damme que tenía su dosis de mala uva. Muy bueno tu post sobre Saturn3, una de esas películas que preferiría olvidar, vaya despropósito. Saludos. Borgo.

dvd dijo...

Para que te hagas una idea; es como el cine último de john Waters: ya no le hace ni puñetera gracia a nadie...

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!