martes, 3 de mayo de 2011

Paseando la mascota



Abundando en el tema zombi, tal y como hicimos el fin de semana pasado, otra cinta atípica y que ha pasado desapercibida por completo es una curiosa producción canadiense que combinaba humor negro y gore pasado de vueltas. FIDO cuenta cómo una especie de nube tóxica espacial ha devuelto a la vida a los muertos y una empresa, ZomCom, ha inventado un sistema mediante el que se puede inhibir el instinto asesino de los mismos y convertir a los muertos vivientes en una especie de animal de compañía, en realidad esclavos sin mente. La estética de FIDO está claramente enfocada a las happy movies de los años cincuenta, con familias perfectas en sus casas perfectas, sus coches perfectos y sus amas de casa perfectas; todo ello sazonado con un humor malsano, muy al estilo de roger Corman, que permite licencias que van desde el zombi que se come al perro hasta el vecinito que se compró una mujer zombi para... bueno, mejor lo comprueban ustedes mismos... En FIDO, además, encontramos caras muy conocidas; por ejemplo Carrie-Anne Moss en un rol muy alejado del belicismo icónico de MATRIX; los magníficos secundarios Tim Blake Nelson y Dylan Baker, y Billy Connolly, que borda un papel bastante complejo, como es el zombi que da título al film, que se convertirá primero en el mejor amigo del hijo, narrador en primera persona de esta delirante película, y después irá incluso sustituyendo a la figura paterna. Como les digo, un disloque bizarro con algunos momentos realmente divertidos y otros que, la verdad, dan bastante mal rollo.
Saludos mortecinos.

2 comentarios:

Möbius el Crononauta dijo...

La premisa no está mal.

Saludos

Insanus dijo...

Y el tío de Happiness, que es un crack. Muy recomendable, viejos, es como un Eduardo Manostijeras con zombis.

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!