martes, 31 de mayo de 2011

Alumnos y maestros #2



En un giro que a mí me parece de lo más curioso y significativo, en relación a la blandita película que comenté aquí, un director de videoclips, a todas luces inferior al maestro Eastwood, debutó hace diez años con un sólido (rocoso) thriller policial que abundaba exactamente en la misma premisa, aunque con una querencia más oscura y pesimista. TRAINING DAY está repleta de luces y sombras; luces provenientes de una pareja protagonista excepcional y un guión trepidante, resuelto en apenas 24 horas, que da exactamente lo que promete, acción verosímil y un descenso a la mente de un policía corrupto hasta la médula. A lo mejor lo que choca y enfría las expectativas es tanto tremendismo; todo ocurre en el primer día de un agente (Ethan Hawke) que ha sido ascendido a la brigada de estupefacientes, donde conocerá a su experimentado y "especial" compañero, con métodos más propios de los delincuentes a los que se enfrenta que de un policía propiamente dicho. El arranque es prometedor, con Denzel Washington comiéndose la pantalla en cada frase, y deja al espectador con ganas de saber más, de saber a dónde va a desembocar tanta ambigüedad moral. Mientras Fuqua no se come demasiado la cabeza el asunto funciona, TRAINING DAY es un film entretenido y solvente; cuando se muestra ambicioso y quiere emular, por ejemplo, a De Palma o a Scorsese, se le ven las costuras y empiezas a no creerte casi nada de lo que ves, comenzando por la premisa fundamental del engranaje, que es la soterrada cuenta atrás que sostiene sobre su cabeza el agente Harris, de la que sólo nos enteraremos con el metraje muy avanzado. Curiosamente, esto sirve para darle empaque a su convencional historia de novatos y maestros, pero luego te preguntas: "Bueno, si este tipo es un zorro viejo, si se las sabe todas... ¿no podía haber apartado al novato durante ese día con un simple [Eh, chaval, vete a casa; tómate tu primer día libre, mañana nos vemos]?". Quiero decir, ¿cómo carajo va a perder el tiempo Harris con todo el rollo ese de la iniciación cuando sabe que está simple y llanamente sentenciado a muerte?... Es en esos resortes de guión donde TRAINING DAY se revela en toda su convencionalidad como vehículo de lucimiento de Washington y la aparta de títulos mayores; aun así, se trata de un espectáculo visual magnífico para una tarde sin mucho que hacer.
Saludos adiestrados.

2 comentarios:

Möbius el Crononauta dijo...

Una pendiente desde hace mil... ¡tengo que ponerle solución a eso!

dvd dijo...

Seguramente te gustará... pero no le pongas el listón demasiado alto...

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!