sábado, 23 de octubre de 2021

¿Asno o maestro?


 

Qué película más desaprovechada es THE VOYEURS, sobre todo después de sobreponerse al complicado reto de adueñarse del motivo hitchcockiano (imposible apartar la mirada de ahí), hacerlo suyo y, a partir de ahí, convertirse en otra cosa, que juguetonamente pretende jugar en la liga de un Atom Egoyan. Demasiada presunción para lo que finalmente se revela, que es a un director que enjuga su inexperiencia tirando de manual televisivo. Y es que el juego de ventanas, exhibicionismos y aspiraciones/envidias, se abre tímido, presentando a una pareja que al fin logra un buen sitio para vivir juntos, y que se encuentra con la anécdota de unos vecinos de enfrente que, manteniendo sus amplios ventanales siempre abiertos, revelan una agitada vida sexual, socialmente sofisticados, e incluso con amagos de lo que podría ser una promiscuidad galopante. Ellos, normalitos, se medio excitan y los medio envidian, y convierten esa conexión visual prácticamente en una especie de espectáculo online. Pero deciden dar un paso más allá, tan sólo para descubrir que la vida de sus vecinos no es tan luminosa, y que incluso podría poner en peligro su propia relación. Hasta ahí más o menos bien, pero los bandazos narrativos (de tono, básicamente) son tan acusados, que llega a parecer que hay tres o cuatro películas diferentes (y no siempre corresponsales entre sí), a lo que contribuye un metraje excesivo para lo poco que se cuenta, que me parece de una mojigatería insoportable, especialmente cuando llega el momento de dar giros imposibles, la mayoría gratuitamente ufanos de sí mismos. Una película, insisto, incomprensiblemente desaprovechada, y cuyo conservador espíritu queda explicado en una escena igualmente ininteligible, en la que se cita la célebre fábula de Esopo sobre el asno inconformista...
Se puede ver, pero terminarán mosqueándose. Lo mejor, la versión (muy bien traída) de Billy Idol.
Saludos.

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... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!