lunes, 11 de julio de 2022

Huir hacia atrás 3


 

De no ser por Hitchcock, por su inigualable inventiva, por su excepcional sentido del ritmo, por sus personajes siempre transitando entre géneros con fluidez, podríamos afirmar que la mejor adaptación de la novela de John Buchan se hizo en 1978. THE THIRTY-NINE STEPS no sólo toma distancia del film de 1935, sino que es infinitamente más fiel al libro, y además aporta algunos momentos de gran calidad cinematográfica. El arranque es diferente, eludiendo todos los sucesos teatrales, y amplificando la trama de espionaje, con el siniestro personaje, magistralmente interpretado por David Warner, urdiendo un plan maestro para determinar el sino de la WWI. El encargado de dar vida a Richard Hannay (aquí sudafricano, en lugar de canadiense) fue Robert Powell, actor de limitados registros, pero que clava a este aventurero eternamente perseguido, y finalmente convertido en perseguidor. Es de destacar también la excelente ambientación (esas cuidadas producciones de la Rank), que al fin nos sitúa plenamente en 1915, la brumosa fotografía de John Coquillon (habitual de la Hammer), o el espléndido final, con una espectacular escena en las mismas manecillas del Big Ben que podría haber firmado el propio Hitchcock. 
En definitiva, una notabilísima versión, increíblemente desconocida hoy día, pero que no tiene absolutamente nada que envidiar a la original, que sigue conservando su aura mítica e intocable.
Saludos.

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... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
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