viernes, 7 de febrero de 2020

Celebración del sufrimiento



ACE IN THE HOLE es una de esas películas que suelen pasar inadvertidas para casi todo el mundo, puede que por lo complicado que resulta conectar su duro e impactante mensaje con el de su director, Billy Wilder. Kirk Douglas interpreta a Chuck Tatum, un tipo sin escrúpulos, un pseudoperiodista de los que abundan hoy día, que da con sus huesos en una minúscula redacción pueblerina, tras ser despedido de multitud de periódicos por sus métodos al borde de la ley. La larga introducción, con el personaje principal presentándose ante sus nuevos compañeros, mientras los va analizando uno a uno, es magistral, encadenándola con el hastío acumulado tras un año que ha pasado sin que pase nada. De repente, un golpe de suerte le lleva hasta una montaña de carácter sagrado para los indios, donde un hombre se encuentra atrapado por un derrumbamiento, sin que se pueda hacer nada por él. La complejidad del film estriba en los distintos niveles de percepción: Tatum es un oportunista, pero es el único que se atreve a entrar en la angosta cueva; fuera hay quien lo idolatra y quien lo desprecia, pero cada vez que está junto al hombre atrapado, al que sólo puede ver por un agujero, es su único rayo e esperanza. Por un lado parece contribuir al imposible rescate, pero por otro sabe que su fama y su cuenta corriente aumentarán mientras el hombre siga atrapado. Un amargo y muy actual tratado sobre el dudoso poder de los medios, cuando éstos prescinden de la ética y sólo se preocupan del beneficio inmediato. Una excepcional película del maestro Wilder, en un registro inesperado, y uno de los trabajos más matizados de Douglas, siempre al borde del patetismo.
Saludos.

No hay comentarios:

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!