lunes, 15 de marzo de 2010

Las cosas que me pasan a mí

Porque sí, porque en cuestión de cine más que comer engullo; así me pasa que de vez en cuando me trago algo realmente indigesto. En este caso, se trata del enésimo subproducto (lo de "sub" totalmente justificado) de terrorcillo zafio, incomprensible y detestable que yanquilandia no cesa de producir mientras haya mongoloides como yo que se lo traguen.
Y como siempre en estos casos, seré breve.
BABY BLUES vendría a ser la traducción de "depresión postparto" o algo así, lo que a un par de chalados les da para firmar un guión que, por no ser, no es ni malo, sino demencial. Una mujer vive en una apartada granja con sus dos hijos no mayores de doce años, su marido es camionero y casi siempre está fuera... Sigo con la apasionante sinopsis. Entre tostada y tostada, sin que ocurra nada extraño, a la buena mujer le da por coger un cuchillo de cocina y perseguir a los niños por la dichosa granja, así, por las buenas. Y sesenta minutos después, la señora y el cuchillo, y los niños escondiéndose; y también sale un vecino que fuma porros y que (evidentemente) se cargan... y el marido no llega porque tiene que hacer horas extras... En fin, que no la vean, que aprovechen y revisen la obra de don Miguel Delibes, después me lo agradecerán...
Saludos tristones.

2 comentarios:

leolo dijo...

Te vendría bien ponerte a dieta cinematográfica, sólo de buenos productos. O en el peor de los casos, no engullir y masticar más antes de tragar.

Saludos

dvd dijo...

Pues sí...

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!