jueves, 29 de diciembre de 2022

El anticlásico


 

Por extrañas razones, y siendo un gran admirador de la saga, he caído en la cuenta de que me había saltado EVIL DEAD 2, que no había vuelto a ver desde hace muchísimo tiempo, y que ha cobrado una nueva e interesante perspectiva. Es ésta probablemente una de las secuelas más improbables e inesperadas de todos los tiempos; de hecho, ni siquiera estoy seguro de poder atribuirle dicha etiqueta, pues Sam Raimi directamente se encargó de subvertir cualquier expectativa, no sólo convirtiendo el terror en comedia, sino creando un universo propio sin necesidad de autoplagiarse. EVIL DEAD 2 es, sin más, otra película, como si Ash (aquí ya forjando su icónica leyenda) hubiese sido arrojado a un multiverso desquiciado y juguetón. El personaje es el mismo, pero no el mundo que habita, por lo que es imposible no torcer el gesto al verlo dirigirse despreocupadamente a la misma cabaña para disfrutar de un romántico fin de semana. Raimi lo deja claro desde bien pronto, y lo deja todo en manos del recital de un Bruce Campbell desatado, algo así como un antihéroe patoso y obstinado, que no sabe por qué esos espíritus le hacen la vida imposible, así que él se convertirá en su mayor pesadilla. Los efectos, deliberadamente chuscos, cercanos al cartoon, tienen el sabor de una serie B consciente de su naturaleza. Los gags son un carrusel de inventiva, como si cada elemento en esa cabaña perdida obedeciese a su propio propósito. Y el final, es cierto, adelantaba ya lo que nos esperaba algunos años después; pero incluso ahí, Sam Raimi volvería a hacer lo que salía de los cojones, como el gran creador que es.
Imprescindible si necesitan descontaminarse de solemnidades.
Saludos.

2 comentarios:

ricard dijo...

Es divertidísima. Yo la prefiero a la primera.

Saludos y Feliz Año.

dvd dijo...

Feliz año!!...

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!