jueves, 14 de marzo de 2024

El problema, la solución y el desafío


 

Recién hemos despachado los oscar y ya nos ponemos manos a la obra con los Goya de este año, que es imposible abarcarlo todo a la vez y en todas partes... Por empezar con una, 20.000 ESPECIES DE ABEJAS me parece una película bienintencionada, pero que comete todos los fallos que puede tener una ópera prima. El más prominente, el ensimismamiento con el motivo principal, las dudas de un niño de ocho años respecto a su género, con lo que de telúrico tiene esto en la casa familiar, a la que acude su madre, en proceso de separación, y sus otros dos hijos. Mal asunto que tu guion, presuntamente original, sólo obtenga interés mediante la anécdota, alargando ésta hasta más de dos horas que bracean entre un naturalismo que no alcanza a corporeizar, o el lucimiento individual de sus actores y actrices, a los que no les escatima su "momento". Todo esto hace que albergue una incómoda sensación de "expectativa inflada", cuando en realidad no consigo ver ese "milagro fílmico", que necesita mayor dosis de talento y menos sendas transitadas. Supongo que debe tener su público, y fiel, pero yo sólo he visto un problema metido con calzador, me he perdido la solución de imbricar lo extraordinario en la siempre huidiza normalidad, y he echado de menos el desafío de fomentar mayores deseos de presentarnos, como espectadores abiertos, esa línea que no esperábamos obtener.
Es poca cosa.
Saludos.

No hay comentarios:

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!