martes, 23 de enero de 2024

Nevermore


Es imprescindible aceptar el dispositivo para entregarse a THE FALL OF THE HOUSE OF USHER, lo último de Mike Flanagan junto a su equipo habitual y alguna que otra sorpresa "sorprendente". El dispositivo, el parque de juegos, el parque temático son fundamentales para encontrar la diversión en una propuesta tan perversa como ésta. No lo digo tan sólo por su argumento, que se desliza a partir de un imperio creado sobre la base de expedientar cualquier tipo de escrúpulos, en directa pugna con el carrusel de personajes de SUCCESSION. Aún más, Flanagan crea una serie sobre el desmoronamiento de dicho imperio, precisamente desde la destrucción de sus pilares; así, la obra magna de Edgar Allan Poe es pervertida al hibridarse, en bastarda comunión, con otros relatos inmortales de su autor. He ahí el artefacto, el juguete mediante el que, capítulo a capítulo, la casta de los Usher se encamina a su fin verbigracia de la revisitación a "La máscara de la muerte roja", "Los crímenes de la calle Morgue", "El corazón delator", "El gato negro", "El pozo y el péndulo" o "El barril de Amontillado", por citar algunos, y obteniendo su punto álgido en la inefable rúbrica de "El cuervo", por supuesto. Ello conlleva un doble acierto, al concitar nuevos adeptos en torno de una serie ágil e imaginativa, mientras los que hemos seguido estos años a Flanagan volvemos a congraciarnos con un magnífico artesano, aún en sempiterna búsqueda de abrir el cofre secreto e inaccesible (de momento) de la autoría absoluta. No lo necesita en esta estupenda e hipnótica serie, con una producción lujosa y un elenco en perfecta sintonía, para demostrar que se pueden hacer buenos productos estrictamente televisivos, y que Poe es y será eterno, por muchos años que pasen...
Altamente recomendable.
Saludos.

No hay comentarios:

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!