¿Vieron PERDIDOS? La pregunta es pertinente, no crean. FROM está hecha por el mismo equipo creativo de aquélla, y vaya si se nota. De todas formas, se me ocurre que el acercamiento que aquí existe al imaginario de Stephen King está desaprovechado, básicamente por la obsesión de un cliffhanger perpetuo, que se impone a toda lógica narrativa, y paso a las desventajas. Allí era un avión que se estrellaba en una isla misteriosa, aquí un pueblo en mitad de la nada al que se llega, pero no se puede salir de él. La única novedad, la amenaza constante de unos seres que salen al anochecer con aviesas intenciones, lo que obliga a guarecerse protegidos por unos amuletos. Muy pronto, es evidente que ésta no es una serie de terror, sino un batiburrillo donde puedes meter cualquier cosa que se te ocurra con efecto triple: alargas el vacío, creas extrañeza y apuestas sobre eternas promesas de revelaciones definitivas. Aún más. Es cargante y exasperante la distribución de roles; siempre los mismos personajes, arquetípicos, incongruentes en una lógica que no se sostiene excepto para crear momentos de tensión, que rozarían la comedia involuntaria. Hay mucha más gente, pero no sabemos quienes son, ni qué hacen, simplemente son maniquíes andantes, extras que rellenan situaciones que de por sí parecen de relleno. Hay monstruos, sí, pero llegado el momento ya son de la familia, y no esa amenaza indestructible que se prometía. Las explicaciones no las busquen, al no existir un horizonte de sucesos lógico se puede dar cualquier situación por arte de magia, eliminando la protesta por una suspensión de la credulidad excesivamente pedestre.
Yo sólo la recomendaría a espectadores poco exigentes, que no se sientan estafados con facilidad y que entiendan que están ante un producto completamente autoconsciente de su propio cinismo.
Para este año se espera la tercera temporada. No sé si la veré, aunque tengo una adepta aquí al lado, claro...
Saludos.
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