viernes, 8 de octubre de 2021

Sangre y arena


 

La versión de DUNE, a cargo de Denis Villeneuve, se antoja necesaria por varios motivos, y no siempre bien comprendidos. Lo primero que me llama la atención es la cohesión del relato, sólo posible por la secuenciación constante, que no duda en sajar sin miramientos todo lo que ralentice el programa principal, a sabiendas de que la monumental obra de Frank Herbert es imposible de despachar en un formato normal de largometraje. Después, se entiende todo muy bien, y es sorprendente, porque las intrigas y personajes se cruzan sin cesar, y se podría correr el riesgo de perderse de no conocer de antemano, al menos lo básico del original. Tampoco hay traiciones, ni a Lynch (como si le importara), ni a la "imposible" de Jodorowsky, ni al sentido del espectáculo, ni a esa aplastante atmósfera de tragedia constante, que Villeneuve consigue que prácticamente mastiquemos. Pero sobre todo se es respetuoso con el libro del que bebe, el primero, del que calculo que ha llegado más o menos hasta la mitad. El director canadiense hace suya la epopeya de Herbert y filma una de sus mejores películas; la mejor, desde luego, de todas las que reconocemos como superproducciones. Y ésta lo es, pero hay algo que la coloca en un lugar particular, porque ese presupuesto no parece despilfarrado, sino puesto al servicio de un argumento desbordante, nunca desbordado. Y por supuesto los actores, constantemente sobreponiéndose a la compleja labor de elaborar, insisto, desde una fidelidad que intuyo agotadora. Es uno de los castings más acertados de los últimos tiempos, y no me sobra absolutamente nadie, aunque ya veremos si no echamos en falta a alguien para la segunda parte... porque va a haber segunda parte, y quién sabe si tercera.
En mi opinión, una de las mejores y más gratificantes experiencias visuales a los que uno puede asistir hoy día en pantalla grande.
Espectacular.
Saludos.

2 comentarios:

ricard dijo...

Desde luego, resulta sorprendente el dominio de la narración, su claridad, su elegancia y su relativa sobriedad que no impide el espectáculo.

Saludos.

dvd dijo...

Creo que Villeneuve ha encontrado una historia que le va como anillo al dedo, y, aunque involuntariamente, también un inadaptable como Herbert...
Un saludo.

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!