lunes, 18 de septiembre de 2023

Puñales por la espalda


 

Todos han hablado de SUCCESSION; todos hablan de SUCCESSION. Hablemos de SUCCESSION. Hablemos, por ejemplo, de lo trillado de su estructura, lo formuláico de sus actuaciones o lo grosero de sus giros. No todo va a ser caviar para la "gran serie" de los últimos tiempos, que con sus cuatro temporadas, a base de robustos cañonazos de una hora, nos puso al tanto de las lindezas de una familia que no tiene remilgos a la hora de destrozarse mutuamente en una descarnada lucha por suceder al gran patriarca. Todo con el trasfondo de un gigante de la comunicación, como estandarte del poder invisible, capaz de poner y quitar presidentes, iniciar guerras o hundir economías. Los aciertos, sin embargo, son muchos, casi todos provenientes de la prodigiosa cohesión con la que los episodios avanzan, sin que notemos tambaleos ni el ritmo decaiga. Más que su narrativa, que no tiene nada de sorprendente (aquí renace la estirpe de DALLAS, DINASTÍA o FALCON CREST), el verdadero logro es su vórtice emocional, a modo de montaña rusa sin tregua, que cabalga sobre su vertiginoso montaje, y en especial el de sus grandes planos secuencia. Es Shakespeare, pero no nos flipemos con ello; es Scorsese vestido con la túnica barata de Brian DePalma; es un zumbido en segundo plano, sólo para oídos acostumbrados, que una vez percibido contiene la clave para descifrar en qué consiste conspirar contra conspiradores, tan sólo para descubrir que quizá no haya nada legítimo. Yo, humildemente. les recomiendo que la "adoben" con dos complementos indirectos, pero que a lo mejor les aclaran que bulle tras el carrusel de sonrisas falsas, frases lapidarias y concursos biliares. Pónganse antes de verla JUAN NADIE, de Capra, justo al final, NETWORK, de Sidney Lumet, y sólo si aún conservan algo de fe en la humanidad, rematen con EL MANANTIAL, de King Vidor... Ahí queda eso...
Saludos.

2 comentarios:

car dijo...

Never would I have thought you'd even have watched, let alone reviewed such a series as Succession, David!! You continue to surprise me, and refreshingly so! It certainly has the same 'vortice emocional' as Dallas and Dynasty as well as the King Lear type dynamism (I bet the Shakespearian actor, Brian Cox, must have played him on stage at some point) which is why I loved it so much. The best, however, is the opening credits, old and new montages with a chaotic sharped toned piano - genius! But not as genius as The White Lotus - I'd love you to review that for your next series, David. Nothing off limits to you. Thank you for sharing your take on this. Big hug. X

dvd dijo...

Sí, Brian Cox está muy por encima del resto, de todo el resto. Por eso (¡SPOILER!) su desaparición en el último tramo de la serie es más una rémora que un golpe estratégico. Es curioso, pero tan huérfanos y perdidos deja a sus "hijos", como a los actores que los interpretan.
Y sí, tengo esa recomendación tuya pendiente de hincarle el diente.
Saludos, abrazos y todo lo demás...

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!