martes, 15 de octubre de 2019

La clase de Lubitsch #36



Como el que no quiere la cosa, casi sin esfuerzo, Ernst Lubitsch pasa de una obra maestra a otra y filma THE SHOP AROUND THE CORNER (a la que estoy seguro de que ustedes recordarán mucho más como EL BAZAR DE LAS SORPRESAS), en la que desmitifica la habitual gazmoñería de las comedias románticas y embarca al espectador en un vaivén imparable de sentimientos, que van desde el arribismo y egoísmo, el fracaso de la integridad o la falsedad acentuada en los puestos de trabajo que implican una estrecha interactuación. Y por si fuera poco, en 1940, a Lubitsch se le ocurre la barbaridad de adelantarse un montón de décadas e inventar el dilema de las ciberrelaciones; epistolarmente, claro, pero que en este caso es el motor perfectamente engrasado, mediante el que asistimos a la conveniencia de adoptar una personalidad u otra en función de quién tengamos delante. Ella es una joven "desamparada" que logra emplearse en la famosa tienda del título, gracias a la intervención, un poco involuntaria, del jefe de personal, que desde el principio ve en ella ese punto de manipulación femenina que contrasta gravemente con su intachable criterio moral. Ambos mantienen correspondencia con un/una pretendiente anónim@, sin sospechar que están más cerca e ell@s de lo que creen, y es sólo mediante un equívoco que desemboca incluso en un trato totalmente injusto que se dan cuenta de lo insensato de algunos de sus actos y decisiones. Es decir, todo un tratado acerca de las miserias y sinsabores en unas relaciones humanas, que en realidad vienen a señalar con gran amargura lo solos y solas que podemos llegar a estar. Luego, a alguien en Hollywood se le ocurrió que a lo mejor no era buena idea tildar de comedia cosas como ésta, con tanta bilis supurando tras unas imágenes y diálogos cargados de intención. El binomio Stewart/Sullavan sigue estando en la cúspide del antirromanticismo, y el guion de Samson Raphaelson captura toda la esencia de la obra original del húngaro Miklós László, que la hace arrebatadoramente moderna casi 80 años después.
De nuevo, obra maestra absoluta.
Saludos.

2 comentarios:

Mister Lombreeze dijo...

"moderna", ésa es la palabra.
#peliculas4millenials

dvd dijo...

Una auténtica lección de cine, creo yo...

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!