miércoles, 10 de abril de 2019
Ser un@ mism@
Una de las películas que concurrían a los Goya en el apartado de mejor película europea era GIRL, ópera prima del belga Lukas Dhont, que trata un tema tan candente como necesario, sin juzgar, pero tampoco con paños calientes, dejando su durísimo trasfondo moral y ético expuesto ante nuestros ojos de "grandes jueces omnímodos".GIRL trata sobre Lara, una chica de 15 años que nació en un cuerpo de chico y cuya vida no puede ser más complicada, aunque no siempre por las razones que podríamos presumir. Lara vive con su padre y su hermano de seis años, y quiere ser bailarina de ballet clásico, y está esperando una operación de cambio de sexo, y se acaban de mudar, y cada día debe lidiar con el conflicto de no saber si lo correcto es actuar como una chica. Todo eso ocurre y a todo ello asistimos sin ningún tipo de énfasis, simplemente intentando entender lo difícil de una vida así. Y Dhont lo filma con calma y limpia mirada, apoyado en la superlativa interpretación de Victor Polster, que impresiona por la naturalidad con la que encara un rol tremendamente complicado y siempre al borde del cliché. Una película, ya digo, necesaria hoy día que todos tenemos opinión sobre todo, y además un buen ejemplo de cine social bien entendido, sin posiciones absolutistas y sin miedo a mostrar dos o tres escenas francamente duras y que se quedan un buen rato en la cabeza.
Saludos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...
No hay comentarios:
Publicar un comentario