lunes, 13 de febrero de 2023

La cuadrilla del arrabal


 

Como una premonición fatal, o una jugarreta del destino, a pocas horas de recibir el Goya de honor, fallecía Carlos Saura, nombre capital del cine español de todos los tiempos. A menudo se habla de Saura como ese "joven turco", inquieto, inconformista, audaz e inteligente; el cineasta que pretendió cambiar el sistema desde dentro, con una visión que señalaba las costras de un sistema podrido, con el sigilo indetectablede quien siempre va un paso por delante. La primera obra remarcable de Saura fue LOS GOLFOS, retrato a ras de suelo de ese Madrid de periferias que eran huertas, arrabales. Un páramo de miseria del que apenas se podía sacar la cabeza, y en el que nos encontramos a un grupo de jóvenes, vivales de pequeños hurtos los unos, robos con agresión otros, que dilapidan las horas entre tabernas de cuartillos y mus, mastodónticos salones de baile para emprenderla con las chatis o mediocres organizadores de capeas. Porque uno de ellos, Juan, quiere ser torero a toda costa; y para ello, su cuadrilla tiene que reunir las veinte mil pesetas en poco tiempo. Saura, que escribió el guion junto a (nada menos) Daniel Sueiro y Mario Camus, desparramó su cámara, nerviosa y ávida de realidades, por el caótico mercado de Legazpi, los chozales de labranza, donde se oye el silencio de la espalda doblada y el llanto de los sucesivos críos. Y está el Bernabéu, desde fuera, que deja los "aledaños" desiertos, ideales para la colecta de espejos, bombillas y otros repuestos. Era otro cine, que pugnaba a la sombra del francés, el free cinema británico, y sobre todo el neorrealismo italiano, con la particularidad de que aquí todo eelo pasaba un implacable filtro cainita, que no terminaba de ver las ventajas de que en Cannes (porque estuvo en Cannes) fuesen testigos de la represión franquista en toda su crudeza. El final, incluso mutilado por la censura, es tan incontestable, tan demoledor, que daba cuenta de ese bisturí, entre realista y poético, que sólo los muuy grandes poseen. Saura era uno de ellos, y algo de ello contaremos...
Saludos.

2 comentarios:

car dijo...

Absolutely! He meant loads to me too in lots of ways! Having studied Lorca at Uni and then also watching Saura were some of the reasons I fell in love with Spain many years ago! I just know he's keeping good company in filmmakers nirvana alongside Hugh Hudson who died the same day. A sincere little homage from you. Thanks. X

dvd dijo...

Saludos de nuevo!!!
Una gran pérdida para el cine español, porque Saura fue uno de los cineastas que más y mejor modernizó dicha cinematografía, fundamentalmente desde los sesenta hasta finales de los setenta, antes de su fascinación por los documentales musicales. LOS GOLFOS, que se rodó, por ejemplo, a la vez que la ópera prima de Godard, es, hoy día, absolutamente moderna, con ese retrato descarnado de un país que siempre será tan hermoso como miserable.
Prometo ir trufando estas páginas con algunos de sus mejores títulos.
Y sí, me enteré del fallecimiento de Hudson, de quien ya imprimí por aquí CHARIOTS OF FIRE hace algunos años.
Un saludo y un abrazo.

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!