jueves, 12 de diciembre de 2019
Corran, vayan y díganle
Filmada como un viaje circular, más que como un típico western crepuscular, a base de redenciones y rendiciones, es verdad que THE SISTERS BROTHERS contiene mucho de todo ello, tanto del clasicismo más reconocible como de los títulos que han hecho del género toda una tabla insospechada de renovación del mismo. Es ahí, en la mezcla, de brutalidad y ternura, de humor y momentos desgarradores, donde Jacques Audiard consigue atrapar el misterio de la extraordinaria novela de Patrick deWitt, y erigir uno de los mejores y más inesperados westerns de los últimos tiempos. Concebida como una búsqueda (la que los mencionados hermanos inician para atrapar a un químico que ha inventado una fórmula para visibilizar el oro en el agua, por orden de un misterioso "Comodoro"), finalmente queda como un regreso, o un extraño viaje iniciático y revelador, donde nadie es ya el mismo. Mención aparte merece el contundente reparto, responsable de que el ritmo no dacaiga en ningún momento. Espléndidas son las interpretaciones de John C. Reilly y Joaquin Phoenix, y no les van a la zaga un conmovedor Jake Gyllenhaal y Riz Ahmed, gran revelación de la película. Como curiosidad, el plano final, que involuntariamente previsualizaba a Rutger Hauer, fallecido el pasado mes de Julio, casi despidiéndose de todos los que lo hemos disfrutado
en pantalla.
Para verla más de una vez.
Saludos.
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... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...
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