lunes, 29 de junio de 2015
D.W.: El padre del cine #25
Bueno, esta semana empiezo mis vacaciones, así que terminemos de una vez con el año 1912... y dejemos algo para la vuelta.
En THE MENDER OF THE NETS, Griffith volvía sobre uno de sus temas recurrentes, amoríos y desvaríos en zonas pesqueras. Una arrebatada Mary Pickford (en el que se cree que pudo ser su última aparición para la Biograph) daba vida a una zurcidora de redes que deja prendado a un joven pescador, aunque la aparición de su anterior amor (la estupenda Mabel Normand) hará imposible que dicho compromiso pueda prosperar. Bitzer... Bitzer... Bitzer... Poco más a añadir.
THE NEW YORK HAT era un corto francamente escabroso y, me parece, poco comprendido. Narraba un complejo juego de personalidades, apoyado en la administración de la fortuna que una mujer a punto de morir sabe que dejará a su joven hija en la ruina, víctima de la avaricia de su marido. Sin embargo, la compra de un simple sombrero será el disparadero de inconvenientes rumores, que dejan en entredicho incluso la reputación de la joven acerca de quién será su misterioso benefactor.
Y para acabar este año, nada mejor que una de las grandes obras maestras de Griffith. THE MUSKETEERS OF PIG ALLEY, maravillosa precursora de indiscutibles del séptimo arte como THE GODFATHER o GANGS OF NEW YORK (añádase, al gusto, cualquier película favorita que transcurra en Norteamérica y cuyo género sea "gangsters"). Considerada como quizá el primer asomo del género de gangsters al celuloide, se trata, además, de una obra visionaria en fondo y forma. Se habla de la Ley Seca antes de que fuese promulgada, y hace del control ilegal de la distribución de alcohol su motivo principal; los poderosos iconos de los malhechores subvierten cualquier idea preconcebida hasta entonces, y no son simples "malos" que tarde o temprano serán derrotados por el héroe, sino una temible encarnación de las sombras que escapan a la ley. Del espectacular trabajo de Billy Bitzer poco puedo añadir a estas alturas, excepto que les invito a que disfruten la experiencia de su visionado y descubran cómo Griffith allanó el camino a tantos y tantos cineastas posteriores...
... Y, saludos...
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... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...
1 comentario:
Una persona de bien que tras ver ese fotograma que acompaña tu reseña de THE MUSKETEERS OF PIG ALLEY no va corriendo al youtube a ver esta maravilla de Griffith, debe replantearse su pirámide de Maslow cinematográfica. Los primeros 15 minutos del Cine de Gángsteres de la Historia del Cine. Casi nada, compañero.
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