jueves, 12 de marzo de 2020

Hasta luego, Lucas #11



Me dicen, me cuentan, me rumorean que THE RISE OF SKYWALKER clausura la saga de STAR WARS... Y no sé si debería creérmelo, aunque tampoco es que me importe demasiado, porque tampoco tengo los agobios del fan demonizado por los tiempos. El caso es que esta saga se ha desvirtuado por una cuestión muy simple, precisamente esa: el tiempo. Y si atendemos al film tan sólo como una unidad, nos encontramos con una barbaridad de problemas, todos juntos en una película que en un principio no tendría por qué ser aburrida. Ahora bien, no le veo sentido a que el fin de fiesta lo componga un fastuoso aglutinante de viejos recortes, porque eso, y no otra cosa, es este larguísimo y descoyuntado amasijo de Ctrl C/V, al que puntualmente ayudan los efectos digitales a no caer en la autoparodia. Todos sabíamos cómo empezaría, se desarrollaría y acabaría; no, no hay una sola sorpresa, y los guiños de peso están dosificados con racanería incomprensible. Hay, sí, momentos, momentillos más que momentazos. Breves insertos de supuesta genialidad que dejan a las claras que éste es un producto meramente funcional y de nulo calado reflexivo. Quizá sea por eso que nunca me he considerado un gran fan, y quizá por eso me gusten más los episodios marginales, como el dirigido por Gareth Edwards.
No sé, pero no puedo decir ni mala ni buena, sólo que se ve y poco más.
Saludos.

No hay comentarios:

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!