domingo, 21 de junio de 2020
Rincón del freak #411: Rapaces nocturnas, engoladas y petulantes
Me divertiría muchísimo realizar una crítica lo más sarcástica posible de un artefacto como LORD OF TEARS, pero no terminaría de ser totalmente justo con lo que a todas luces parece, debe ser una especie de trabajo de graduación. Desconozco este dato, pero el inocente amateurismo que destila la cinta puede superar incluso al espectador más avisado; tiene cosas, más que malas, entrañables, y otras que no están mal, pero que se diluyen en mitad del despropósito. El planteamiento es interesante, abundando en la no tan conocida figura de Moloch, el dios insaciable de sacrificios, y aquí encarnado en un extraño ser con cabeza de búho y atuendo decimonónico. A lo mejor un corto habría sido más ajustado, porque el pobre Lawrie Brewster da la impresión de no saber qué diablos inventar para hacer relleno. Un tipo (porque no creo que sea actor) llega a la apartada mansión familiar, recibida en herencia tras la muerte de su madre, y mientras es acosado por las recurrentes pesadillas en las que el búho humanoide lo acosa, le da lugar a entablar contacto con una muchacha americana "que pasaba por allí". El resto es para psiques tolerantes, no por nada, sino porque el film es un despropósito uñero, con escenas directamente ridículas y otras que no siguen una lógica estructural. El montaje no aparece, y el argumento se enreda él solo, llegando a rozar la desintegración beckettiana. Por salvar algo, salvaría las pomposas frases emitidas por el hombre-búho, y poco más.
En fin, que no la vean, y así pueden emplear el tiempo en practicar el tiro a distancia... Bueno, quizá no sea buena idea...
Saludos.
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... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...
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