domingo, 14 de octubre de 2012
Rincón del freak #80: Indecencia travestida de inocencia
El otro día hablaba aquí de PROMETHEUS; no muy bien, pero tampoco muy mal. Supongo que Ridley Scott me produce un sentimiento único, que no puede atribuirse a ningún otro cineasta; una mezcla de cariño/nostalgia y pena/desidia. Esto, cada vez estoy más convencido, va quedando patente a medida que comprobamos con estupor que aquello tan socorrido de la serie B ya no tiene ningún sentido. No lo tiene porque lo de la "pobreza de medios" no puede corresponder a la imagen filmada en sí; cualquier gañán puede, por una miseria, hacerse con un equipo de filmación bastante aseado, aunque sólo sea, claro, para eso de la "apariencia". La segunda lectura nos dice que, lejos de suponer una ventaja, la eliminación de grano, filtrados lumínicos y Alted woofers lo que dejan expuestos son los fallos de importancia: dirección de actores, ritmo narrativo, calado argumental o esa "sensación de frescura" de las óperas primas que han quedado en nuestra retina a través de los años. No es el caso. El otro día (hace meses, en realidad) vi una cosa llamada WHITE WALL. Insípida, sin nada que contar y con un serio problema de argumento (porque no tiene), es en efecto una ópera prima filmada por un imberbe jovencito, pero no tiene ni mucho menos frescura; y ya es sintomático que un septuagenario pueda ganar en eso a un veinteañero, ahí lo del dinero parece un chiste.
Si quieren saber el argumento (es un decir) tienen páginas informativas en la red; yo sólo puedo decirles que es un horror.
Saludos blanquecinos.
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... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...
1 comentario:
Pero vamos a ver, yo si voy a un burger no espero salir de allí con la sensación de haber comido un solomillo.
Ni todas, ni siquiera la mayoría de las óperas primas son buenas, en realidad son malas o mediocres. Qué ocurre, que cuando alguna lo es, resulta refrescante y se valora mas de lo debido, de hecho muy pocos de esos directores tienen continuidad, y por algo será.
P.D.: Lo mas chocante de Prometheus no es lo mala que es, sino el intentar comprender como alguien como Ridley es capaz de salir a la calle tras haber timado a sus seguidores, aunque esto ya lo lleva haciendo casi una década, supongo que nos tendrá por idiotas, y con razón.
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