Algún tiempo antes de que el maestro Sergio Leone ridiculizara a los "críticos" que, con esa manía de archivador, se sacaron de la manga el término spaguetti western, a base de milimétricos retratos metatemporales, casi pictóricos, un tiempo antes, como digo, Fred Zinnemann realizó una de las películas más impresionantes de todos los tiempos, conteniendo, ya, todas las claves de lo que Leone más tarde puliría hasta el ensimismamiento.
HIGH NOON vendría a significar "mediodía en punto", o algo así; toda una declaración de intenciones, pues el film es un tremendo embudo por el que Gary Cooper cae inexorablemente, sin remisión. Todo va siendo cuidadosamente preparado para que ese sheriff llegue a la fatídica cita, donde le espera la muerte. Al mismo tiempo, ese inquietante devenir temporal nos va mostrando un abanico de personajes impecablemente dibujados; rostros típicos de un lugar y una época rastreada hasta la extenuación por el séptimo arte, elevándolo a la categoría de mito. Son los rostros de la cobardía, la impotencia, los rostros del auténtico ser humano, tan alejado del engañoso arquetipo de héroe tan utilizado por Hollywood. No nos engañemos. Will Kane rezuma miedo por los cuatro costados, sólo su dignidad, la dignidad de la placa, hace que se enfrente solo a la muerte; y acepta el miedo de sus conciudadanos, incapaces de ayudarle en su cometido, embargados precisamente por ese miedo que llega incluso hasta el espectador; porque pocas veces se habrá visto en una pantalla de cine preparar tan minuciosamente una tragedia..., quizás Leone.
No sólo hablamos de un clásico, no sólo hablamos de la soberbia interpretación de Gary Cooper (aquel año [1952] sí hubo justicia), no sólo hablamos de la impresionante partutura de Dimitri Tiomkin, ni de que el elenco estaba formado, ni más ni menos, por un tal Thomas Mitchell, una tal Katy Jurado, otro tal Lloyd Bridges, Grace Kelly, Lon Chaney... secundarios, vamos. No, no sólo hablamos de todo eso, sino de lo más importante: a día de hoy se cuentan por miríadas los infructuosos intentos de volver a plasmar en la pantalla el absoluto dominio del tiempo narrativo por parte del director... A ver quién es el guapo que se pone a ello ¿no hay tanto geniecito suelto? El señor Zinnemann espera pacientemente...
Solitarios saludos.
3 comentarios:
Enorme pelicula, desde luego el control del tiempo real y el narrativo es fantástico, además ese sheriff no podía ser otro que Gary Cooper. Grace Kelly esta guapisima, debe ser una de sus primeras actuaciones ¿no?
En cuanto a Westerns tan grandiosos como este, la verdad es que pocos, bueno ademas de los mencionados siempre esta siempre John Ford (la diligencia,centauros del desierto,El hombre que mato a liberty Valance),o pelis sueltas como "Murieron con las botas puestas", una muerte en compañía pero al final sólo.
Saludos con seis balas ;)
Poco más se puede decir, a cerca de esta suerte de obra de arte. Podríamos decirlo de otra forma, sí, pero en esencia, coincidiría con vuestra opinión.
Un saludo.
Pocos arranques los recuerdo tan claros como el de "Solo ante el peligro":
Un plano general, alguien recostado en el tronco de un árbol vencido. La cámara se acerca (es Lee Van Cleef) y suena una música
"Do not forsake me, Oh My Darling..." y todo toma mal cariz.
Saludos
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