martes, 24 de marzo de 2015

Cuando las cosas cobran su sentido



Había otra joya escondida en las nominadas al oscar a mejor película de animación, otra película de excepcional factura artesanal, que contrasta significativa y enormemente con el nuevo patrón digital, que, cuando no hay una buena historia detrás, tiene sus carencias mucho más expuestas. Por ejemplo, debo decir que SONG OF THE SEA no es una historia que no hayamos visto nunca, desde luego, pero Tomm Moore vuelve a demostrar que su gran virtud no es complicarse la vida con el guion, sino poner éste al servicio de sus bellas, evocadoras ilustraciones. Se trata de una vuelta a los mitos celtas, con sus brujas, duendes, gigantes y el personaje central, una Selkie, que es una especie de sirena, mitad foca, mitad humana, y cuyo canto dota de orden a la naturaleza. La película es una gozada en todos los sentidos y para todos los sentidos, y creo que tiene mucho que ofrecer tanto a niños como a adultos, por sus deslumbrantes imágenes, casi de orfebrería, y ese gusto por ensalzar las pequeñas cosas que me recordaban tanto a Miyazaki. Con ésta y EL SECRETO DE KELLS, Tomm Moore tiene conquistada ya su posición en el complejo mundillo de la animación, donde casi nadie se pone de acuerdo sobre nada, así que seguiremos esperando su próximo trabajo con avidez.
Saludos.

3 comentarios:

David dijo...

"su gran virtud no es complicarse la vida con el guion, sino poner éste al servicio de sus bellas, evocadoras ilustraciones"...
No. Su gran virtud sería que sí esas bellas y evocadoras ilustraciones estuvieran puestas al servicio del guión, todos saldríamos ganando.
Y conste que tanto esta como la anterior de él me gustan...peroooooooo... pues en el fondo el mismo problema que pasa muchas veces con las de Disney

dvd dijo...

Pues yo sigo pensando que casi todas las que estaban nominadas eran mejores que la que ganó...

Mister Lombreeze dijo...

Pues a mí me pareció un tostonazo de cuidado.

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!