viernes, 27 de octubre de 2017

Películas para desengancharse #34



CAOS CALMO, de 2008, es una de esas películas que yo siempre miro con recelo, no porque sean malas, sino porque no conozco a nadie que pueda esgrimir un solo argumento en contra de ella. Y hay muchos, como ese tufo a libro de autoayuda de prosa barata, que nos habla de un drama interior indescifrable pero obvia de manera infantil toda circunstancia externa. Y me explico: Pietro (un Nanni Moretti que está a años luz de su personaje) es un alto ejecutivo de una cadena de televisión que, en un día particularmente extraño en la playa, salva a una mujer de morir ahogada (es extraño porque su hermano hace lo mismo en el mismo momento), pero cuando llega a la casa done veranean se encuentra a su mujer muerta, aparentemente por suicidio. A partir de ahí, Pietro decide quedarse todos los días frente al colegio de su hija, esperando a que esta salga... y empieza el mal rollo. Es estupendo tener la posibilidad de no ir al trabajo nunca, aparcar tu BMW, sentarte en un banco, comer en el restaurante de la esquina, divagar sobre el sentido de la vida, que todas las mujeres que pasan al lado tuyo se te queden mirando como si fueras el último hombre sobre la tierra, que los vecinos te inviten a comer sin conocerte, que la mujer a la que salvaste venga expresamente a buscarte para "devolverte el favor" o que en recompensa al absentismo laboral llegue Roman Polanski en un Mercedes con chófer y te proponga un ascenso de cifras mareantes. Sí, todo eso estaría muy bien en el mundo de Yupi, (aquí yuppie), en el de Amélie o en el de Leticia Sabater, pero no es el mundo real, y si encima lo embadurnas todo con un pastoso barniz de cuñadismo trepidante... Efectivamente, es para desengancharse en todos los sentidos.
Saludos.

No hay comentarios:

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!