lunes, 3 de febrero de 2014

El más listo de la clase



Sólo quien haya leído la obra original de John le Carré sabrá apreciar la estimable densidad de TINKER TAILOR SOLDIER SPY, uno de esos raros hitos en la literatura de espías, tan proclive a los callejones sin salida dada su siempre peligrosa autoindulgencia. La culpa ha sido, como no, de su éxito, lo que dio desde los años sesenta una camada de autores rayanos en una especie de star system; un poco como lo que ocurre hoy día con la terrible novela "histórica" pero, qué duda cabe, con mayor calidad. TINKER... posee una especie de posmodernidad que la deja en un terreno inexplorado y, por tanto, más excitante e intemporal. Bebe de ello esta estupenda adaptación por parte del director sueco Tomas Alfredson, gélida y acalorada a partes iguales; una especie de DÉJAME ENTRAR más adulto, concienciado y descreído. La trama es laberíntica y desorientadora a más no poder, y yo recomendaría un doble visionado en poco espacio de tiempo, porque es difícil dar con su auténtico sentido semántico ¿O es más importante el dibujo (excepcional) de los personajes que el minucioso trabajo de guion? O su brutal composición temporal, con la fotografía de Hoyte Van Hoytema permaneciendo fiel a la expresionista partitura de Alberto Iglesias y logrando la siempre complicada "atemporalidad" de forma. Y por supuesto, es necesario destacar a unos actores muy bien dirigidos y que trascienden el concepto de "secundarios de lujo", porque alrededor de la creciente figura de un colosal Gary Oldman se suceden antológicos momentos de Colin Firth, Toby Jones, John Hurt, Ciarán Hinds y, en menor medida, unos muy controlados Tom Hardy y Mark Strong, además de la siempre estimulante aparición del valor en alza Benedict Cumberbatch.
Una película hermética y enigmática, con un socarrón y gélido sentido del humor y una magnífica vocación de subvertir desde el respeto casi reverencial. En mi opinión, un hito bastante inadvertido.
Saludos.

4 comentarios:

Mister Lombreeze dijo...

Tengo unas preguntas para usted:
¿Quién es Karla?, ¿qué es "Circus"?, ¿qué es "Witchcraft"?, ¿quién es "Control"?, ¿y ese ruso?, ¿de dónde han salido esos cuatro personajes con cara de pasmados?, ¿por qué ese tío hace lo que hace?, ¿qué ha dicho ese tipo cuando te he preguntado "qué ha dicho ese otro tipo"?, ¿por qué es todo tan frío?, ¿por qué están todos paranoicos?, ¿pero quién es el que manda?, ¿por qué sale ahora Estambul?, ¿pero este no estaba muerto?, ¿por qué Tom Hardy lleva peluca?

Mister Lombreeze dijo...

Y, sobre todo, por qué al final suena Julio Iglesias?

dvd dijo...

Tom Hardy lleva peluca por el mismo motivo por el que salía calvo en BRONSON.
Para el resto de preguntas apenas tengo una vaga respuesta: John le Carré es a la novela de espías lo que Thomas Pynchon es al melodrama barato...
(y Forsythe equivaldría a Ray Loriga... ya sabe)

dvd dijo...

...¿?... ¿El que llevaba peluquín no era Mark Strong?...¿?...

... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...

¡Cuidao con mis primos!