jueves, 13 de agosto de 2015
El loco soy yo #3
El caso de MAD MAX BEYOND THUNDERDOME es más que curioso. Preparada con todo lujo de detalles durante cuatro años, incorporaba ya un personaje femenino lo suficientemente poderoso como para ensombrecer el protagonismo del propio Mel Gibson. Tina Turner, de la que poco o nada se recuerda como actriz, sale bien parada con su Tía Ama, la cacique que domina una sociedad basada en el trueque llamada BarterTown (NegoCiudad). Es esta primera parte del film, con una excelente ambientación y un ritmo trepidante la que sostiene una historia que se derrumba incomprensiblemente en la segunda. Max quiere recuperar su caravana (robada por el Capitán Gyro), lo que es aprovechado por Tía Ama para que éste se enfrente al Maestro Golpeador, un enano sobre un gigante que rige en inframundo, donde se obtiene la energía mediante el metano proveniente del excremento de miles de cerdos. El punto culminante es la batalla entre Golpeador y Max en la Cúpula del Trueno, una especie de circo, sin reglas, y con un solo lema: "Dos hombres entran, uno sale"...
Hasta aquí, la tercera parte de las andanzas de Max Rockatansky no tiene casi nada de malo, una película con nervio, inventiva y una pléyade de personajes a cual más interesante. Y desconociendo si fue George Ogilvie (en un insólito ejercicio de democracia extrema) el que se ocupó de dirigir la segunda parte, lo cierto es que pareciera que esta película nos la han cambiado. Max vaga por el desierto, condenado a muerte, y es rescatado por un grupo... ¡de niños!... Y no sólo eso, encima resulta que viven en una especie de paraíso que, oh casualidad, nadie ha encontrado jamás. Los niños son insoportables y tienen a Max hasta las pelotas, porque encima le insisten en que es el capitán del avión en el que se estrellaron y que quieren que les lleve de vuelta. Total, un pastelazo que podría haber colado en una producción Disney, pero que amputa de raíz todo el interés de una película, ya digo, extrañamente dirigida, que tuvo una buena acogida en taquilla y que supuestamente le restó a Miller las ganas de volver sobre su personaje más famoso... Supuestamente...
Saludos.
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... ¿Y todo esto lo ha hecho usted solo?...
No, necesité estar rodeado de siete mil millones de personas...
4 comentarios:
Pues lo mismo, nunca he entendido lo de los niños, la primera parte era genial. Eso sí, siempre he sentido que la persecución final era para "no perder la onda" de la segunda más que por coherencia interna, más para no defraudar a los que esperaban persecuciones locas.
A todo esto, viendo "3 bad men" recordé a "Mad Max" en la parte en que los colonos hacen una carrera por el territorio. Realmente impresionante que se hiciera a mitad de los veinte.
Saludos.
¡Ya volviste! A mi esta saga la verdad, ni fu ni fa. Las dos primeras me entretienen y, aunque les reconozco lo que supusieron para el cine fantástico, me parecen algo sobrevaloradas. La cuarta, la recién estrenada, me ha parecido ya del todo supersobrevalorada. Por lo que he leído, a ti te ha molado. A mi me resultó horrible, no por su aspecto visual, que es fantástico, sino porque me aburrí mortalmente. Ya te firmo mañana cuando la comentes ;)
Aquí te dejo por si te ape echarle un vistazo la etiqueta de mi blog con toda la saga ;) ¡Saludos! http://cinemagnificus.blogspot.com.es/search/label/Mad%20Max
La saga de MAD MAX puede gustar más o menos, pero lo que sí es de justicia otorgarle es el haber creado una manera, una forma de jugar con el género del western clásico subvirtiendo sus códigos y expandiendo sus posibilidades. No hay que equivocarse, Miller creó una franquicia de cine de acción y entretenimiento, nada de pamplinas pseudo-filosóficas como las que he visto muchas veces. Aparte, es que es un señor que dirige muy bien; no tanto a los actores, pero explota los recursos de la cámara y el plano general con habilidad y maestría.
Un saludo a todos.
Cinemagnific: ya la leí. Hubo por entonces la consabida fiebre por el personaje. De todas formas, a ver si te comento algo, que ando escaso de tiempo.
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